El horario no importa: cómo convertir la noche en tu mejor momento para entrenar
Hay algo especial en entrenar de noche. Algo que quienes no lo han probado no terminan de entender.
Faustino Carmona
11/27/20255 min read
El horario no importa: cómo convertir la noche en tu mejor momento para entrenar
Hay algo especial en entrenar de noche.
Algo que quienes no lo han probado no terminan de entender.
Durante el día, todo parece ir demasiado rápido: trabajo, familia, tareas, prisas, obligaciones.
Todo el mundo te pide algo, todo el mundo te necesita, y cuando por fin llega ese momento en el que podrías entrenar… ya no puedes.
Tu cuerpo está cansado, tu mente está saturada y tu sofá se convierte en un imán imposible de resistir.
Y sin embargo, hay una verdad silenciosa que muchos corredores descubren tarde o temprano:
La noche puede ser uno de los mejores momentos del día para entrenar.
No importa lo que diga la gente.
No importa el mito del “te vas a activar demasiado y no dormirás”.
No importa si otros prefieren madrugar.
Lo que importa es que tú encuentres tu espacio, tu ritmo, tu manera de avanzar.
Este post es para ti si trabajas todo el día, si te cuesta encontrar un hueco para moverte, si sientes que entrenar te haría bien pero no sabes cómo encajarlo…
o simplemente si te atrae la idea de salir cuando el mundo, por fin, se queda quieto.
Vamos a transformar ese momento.
1. Cómo vencer la pereza cuando ya es de noche
La pereza nocturna no tiene nada que ver con debilidad o falta de disciplina.
Es el resultado directo de cómo tu cuerpo y tu mente interpretan el final del día.
Tu cerebro tiene una misión ancestral: protegerte.
Y después de un día lleno de decisiones, responsabilidades, ruido y estrés, interpreta la noche como un momento para “cerrar el sistema”.
Por eso aparecen los famosos pensamientos automáticos:
“Hoy no es el día.”
“Estoy demasiado cansado.”
“Mañana empiezo en serio.”
“Solo quiero descansar.”
El cansancio existe, claro. Pero muchas veces no es físico, es mental.
Y la forma de romper ese bloqueo no es pensando más.
Es actuando antes de pensar.
Aquí entra en juego el ritual de inicio nocturno, tu interruptor interno:
🔥 Ritual de activación (2 minutos que lo cambian todo)
Ponte la ropa nada más llegar, sin sentarte.
Coloca una luz suave, no muy cálida (para activar sin dormir).
Pon música que te guste, algo con ritmo suave al principio.
Haz 1 minuto de movilidad para despertar articulaciones.
Haz 20–30 segundos de respiración activa o saltitos suaves.
Este micro-ritual funciona porque le manda un mensaje claro a tu cerebro:
“Estamos entrando en modo movimiento.”
Y en cuanto das el primer paso, el 90% de la batalla está ganada.
2. Los beneficios reales de entrenar por la noche
La noche tiene un poder que a veces pasa desapercibido.
Entrenar cuando el mundo se calma es una experiencia completamente diferente a entrenar durante el día.
🌙 Mejor regulación del estrés acumulado
Sales con el cuerpo cargado y vuelves con la mente limpia.
Es casi terapéutico.
🌙 Sensación de desconexión total
Ya no hay prisa, ya no hay correos, ya no hay tareas pendientes.
Es un espacio solo tuyo.
🌙 Ritmos más constantes
Sin calor, sin sol, sin sudor extremo.
No compites con el clima ni con la gente.
🌙 Calles más vacías y más tranquilas
Menos tráfico, menos ruido, más serenidad.
Correr en silencio es un regalo.
🌙 Conexión emocional distinta
La noche tiene un tipo de magia que el día no ofrece.
Te conecta contigo mismo.
Te permite escucharte.
Te hace entrenar por placer, no por obligación.
3. Cómo entrenar de noche sin quedarte sin energía
El problema no es la hora.
El problema es cómo llegas a esa hora.
⚡ Qué comer antes de entrenar
Elige algo ligero, rápido de digerir y que te dé energía sin pesadez:
Fruta (plátano, manzana, uvas)
Yogur natural con un poquito de miel
Tostada integral con crema de cacahuete
Batido suave (leche + plátano + avena)
Evita comidas grasas o porciones grandes: te frenan.
⚡ Cómo hidratarte bien
Durante la tarde, mucha gente bebe muy poco.
El cansancio nocturno es, muchas veces, deshidratación disfrazada.
Un vaso de agua + un toque de electrolitos suaves antes del entreno = energía estable.
⚡ Calentamiento ideal por la noche
5 minutos bastan:
Movilidad de cadera y tobillos
Activación de core y glúteos
2 progresiones suaves de 10 segundos
Ayuda a romper la rigidez tras un día de estar sentado.
⚡ Evitar la “pájara nocturna”
Si sales con el estómago vacío, puedes quedarte sin energía.
Llévate:
Un dátil
Un gel suave
Medio plátano
Un pequeño sorbo de isotónica
Es suficiente para mantenerte estable.
4. Seguridad cuando entrenas de noche
Esto es IMPORTANTÍSIMO.
La noche es preciosa, pero hay que correr con cabeza.
🔒 Ropa reflectante
Te hace visible incluso a distancia.
Hoy en día hay camisetas, chalecos y incluso cordones reflectantes.
🔒 Frontal o luz de clip
Muy útil si pasas por parques o zonas poco iluminadas.
Además, te da más confianza.
🔒 Elegir zonas iluminadas o conocidas
La noche no es momento para explorar rutas nuevas.
🔒 Comparte tu ubicación en directo
Rápido, gratis y muy útil.
Puedes enviarla a tu pareja o a un amigo.
5. Cómo influye el entrenamiento nocturno en el sueño
Este es el gran mito:
“Entrenar de noche te activa demasiado y no puedes dormir.”
FALSO.
Lo que pasa después de entrenar es que:
Tu cuerpo baja cortisol
Aumentan endorfinas “buenas”
Libera tensiones acumuladas
Mejora la calidad del sueño profundo.
Eso sí: necesitas un pequeño ritual de bajada.
🌙 Rutina para dormir después de entrenar
3 minutos de respiración lenta
5 minutos de estiramientos suaves
Ducha tibia, no caliente
Luz cálida en casa
Una infusión relajante
Tu cuerpo entra automáticamente en modo descanso.
6. Planes ideales para corredores nocturnos
La noche no exige entrenamientos largos.
Lo ideal es aprovecharla con calidad y con calma.
🟦 Entrenamientos cortos y de calidad
Perfectos para mantener ritmo y sensaciones sin elevar demasiado pulsaciones.
🟦 Rodajes tranquilos
Son un bálsamo para el cuerpo y la mente.
Saldrás cargado y volverás renovado.
🟦 Sesiones de fuerza en casa
20 minutos te cambian el cuerpo y la postura.
🟦 Series moderadas
Potentes, pero sin “explotar” el sistema nervioso.
La noche pide equilibrio.
🟦 Técnicas para no sobreexcitar tu sistema nervioso
respiraciones de descarga
caminar 2 minutos tras entrenar
terminación suave, no explosiva
música calmada mientras estiras
Es la clave para dormir como un bebé.
Conclusión: La noche es un regalo si sabes usarla
Entrenar de noche no te resta descanso.
No te roba energía.
No te “activa demasiado”.
Entrenar de noche te vacía, te limpia, te da calma y te ofrece un momento que muchas personas nunca encuentran durante el día:
Un lugar para ti mismo.
Un espacio silencioso para crecer.
Un final digno para cualquier jornada difícil.
No importa el horario.
Importas tú, tu bienestar y tu constancia.
Y la noche, cuando la conviertes en aliada, puede ser tu mejor momento para entrenar.
Si quieres relajarte después de entrenar y favorecer un descanso reparador, puedes probar nuestro té de Ashwagandha Relax Eco, disponible en nuestra tienda online. Es una infusión natural que ayuda a reducir la tensión del día y a preparar el cuerpo para dormir mejor.






